El tiempo no se recupera, por eso debes manejarlo con sabiduría. Es muy popular escuchar la frase “Vive cada día como si fuera el último”. Esta frase nos motiva a aventurarnos y no preocuparnos tanto por el estrés diario. Por un lado es cierto, pero por otro lado, si no eres un atleta de deportes extremos que gana mucho dinero por sus asañas, te sugiero que no vivas “la vida loca” por mucho tiempo a menos que quieras terminar viviendo debajo de algún puente. Lo ideal es encontrar un equilibrio y tratar de no perder la cordura y la perspectiva, recuerda que el tiempo no pasa en vano. Intenta ver un poco más allá y te darás cuenta que cada minuto vale! Programa tus actividades, incluye trabajo, tareas de hogar, entretenimiento, descanso y estudio, trata de aprender algo nuevo cada día y seguro te servirá en el camino!
¡Y jamás dejes que otra persona disponga de tu tiempo sin tu consentimiento!
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