No apresures...

Las cosas buenas toman tiempo

Los proyectos no son nada fáciles de ejecutar, si tienes una Start-up te habrás dado cuenta de lo complejo que se pueden volver las cosas, desde la idea hasta la puesta en marcha y posteriormente a su desarrollo sostenible.

Si al tomar tus decisiones te das cuenta que las cosas no resultan como querías o te da la corazonada que no hiciste las cosas de manera correcta, entonces ten cuidado, podrías estar sacrificando precisión por rapidez.

En este mundo de las Start-up (especialmente las de tecnología) existe la creencia que llegar primero al mercado es una de las cosas más importantes, pero en la mayoría de las ocasiones está sobre valorado. Un producto o servicio de calidad siempre podrá competir en el mercado si se hacen las cosas bien.

Por otro lado, la premura también la puede originar la inexperiencia principalmente por no saber como manejar los tiempos o en su defecto los recursos que pueden terminar provocando una descapitalización de la empresa. 

Por eso, no apresures las cosas buenas llevan tiempo. Una planificación eficiente es tan importante como el producto o servicio mismo. Reúne un buen equipo para que te oriente en las áreas que no dominas y trabaja en base a un presupuesto orientado a metas alcanzables. Los pasos que den como empresa deben ser pasos firmes recuerda que "roma no se hizo en un día".